Dermatitis atópica

Piel sensible, brotes recurrentes y molestias continuas

Mucho más que una piel sensible

Brotes inesperados, picores y malestar que no sólo afectan a tu piel, sino también a tu tranquilidad y calidad de vida. Entender la dermatitis atópica es el primer paso para recuperar tu bienestar.

¿Qué es la Dermatitis Atópica?

La dermatitis atópica es una enfermedad crónica de la piel que se manifiesta en forma de brotes recurrentes. Provoca sequedad, enrojecimiento y un intenso picor, afectando tanto a niños como a adultos. Más allá de los síntomas físicos, puede influir en tu descanso, ánimo y vida cotidiana.

Síntomas más frecuentes

En Clínica Laderma Alicante, cuidamos de tu piel con un enfoque dermatológico avanzado y personalizado, ayudándote a controlar la dermatitis atópica y mejorar tu calidad de vida.
Dermatitis Atópica - Clínica Laderma Dermatología - Alicante

Tratamientos personalizados para tu piel

El abordaje de la dermatitis atópica necesita mucho más que una única solución.

Por eso, en Clínica Laderma Alicante combinamos distintas estrategias para cuidar de ti y de tu piel en cada etapa.

Restablecer la barrera cutánea

La piel con dermatitis atópica pierde su función protectora y se vuelve especialmente vulnerable. Por eso, el primer pilar del tratamiento es restaurar y fortalecer esa barrera natural.

Utilizamos cremas y emolientes específicos para hidratar en profundidad, reducir la sequedad y aliviar el picor.

Esta rutina de cuidado diario no solo aporta confort, sino que también ayuda a espaciar los brotes y mejora la calidad de vida desde los primeros días.

Cada piel es diferente, y lo que a uno le sienta bien, a otro puede desencadenarle un brote.

Por eso, te ayudamos a identificar y evitar aquellos factores que pueden irritar o sensibilizar tu piel: desde algunos detergentes y tejidos sintéticos hasta ciertos alimentos o productos de higiene.

Nuestro equipo te acompaña para adaptar tus hábitos diarios, protegerte de los desencadenantes y reducir al máximo el riesgo de nuevas molestias.

En algunos casos, la piel necesita un apoyo extra.

Por eso, te ofrecemos las alternativas más avanzadas en dermatología: desde medicamentos tópicos y fototerapia hasta tratamientos sistémicos, siempre ajustados a la intensidad de tus brotes y a tus necesidades personales.

El objetivo es lograr el máximo control con la mínima medicación necesaria, priorizando tu bienestar y realizando un seguimiento cercano en cada etapa del tratamiento.

En Clínica Laderma Alicante, cada caso es único y nuestro compromiso es acompañarte en el camino hacia una piel más sana y una vida más tranquila.

Dermatólogas especialistas en dermatitis atópica

Dra. Laura Francés

“La dermatitis atópica es una enfermedad crónica con brotes y remisiones, por lo que es esencial tratar los brotes de forma eficaz y seguir una rutina de cuidados adecuada.”

La experiencia de nuestros pacientes

Por qué elegir Clínica Laderma

Nuestra misión es proporcionar atención dermatológica de alta calidad, combinando experiencia médica con un trato cercano y personalizado. Nos dedicamos a cuidar la salud y belleza de la piel de nuestros pacientes, ofreciendo tratamientos innovadores en un ambiente tranquilo y acogedor.

Equipo Médico Especializado

Liderado por las Dermatólogas Laura Francés y María García Baldoví.

Tecnología Avanzada

Herramientas de última generación en diagnóstico y tratamiento

Enfoque Personalizado

Cada paciente recibe un plan adaptado a sus necesidades.

Compromiso con Resultados

Logramos mejoras visibles y sostenibles.

Resolvemos tus dudas sobre dermatitis atópica

¿Es contagiosa la dermatitis atópica?

No, la dermatitis atópica no es contagiosa y no se transmite de persona a persona, aunque las infecciones secundarias de la piel sí pueden serlo.

Suele aparecer en los primeros meses de vida, aunque puede manifestarse a cualquier edad. Es más frecuente que debute antes de los 5 años.

La causa exacta no se conoce, pero es resultado de una interacción entre factores genéticos, alteraciones en la barrera cutánea, disfunción inmunológica y factores ambientales.

Existe una predisposición hereditaria y suele asociarse a otras enfermedades atópicas como asma o rinitis alérgica.

Los desencadenantes más habituales son frío, calor, cambios de temperatura, sudor, ropa sintética, roce, jabones, infecciones, ejercicio, estrés y alergias.

Estos factores no causan la enfermedad, pero pueden provocar brotes en personas predispuestas.

El diagnóstico es clínico, basado en la apariencia de las lesiones, su localización y la historia personal o familiar de enfermedades atópicas. En ocasiones son necesarios estudios de laboratorio, dado que en algunos casos se observa elevación de la inmunoglobulina E (IgE).

Las lesiones pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, pero en bebés son comunes en las mejillas y el cuello; en niños y adultos, predominan en pliegues como codos, rodillas, cuello, pies y manos.

En muchos casos, los síntomas mejoran con la edad, especialmente si no hay alergias asociadas. Sin embargo, puede persistir o reaparecer en la edad adulta en algunas personas.

Sí, el baño es recomendable, pero debe hacerse con agua tibia, evitando jabones agresivos y secando la piel suavemente.

Es fundamental aplicar emolientes inmediatamente después del baño para mantener la hidratación.